jueves, 7 de enero de 2010

Rafael Millán: Un Castreño en Estados Unidos



Francisco Morales Basurte


RAFAEL MILLÁN PINILLOS NACIÓ EN CASTRO DEL RÍO el 1 de Noviembre de 1919. Sus comienzos profesionales fueron a los diez años de edad, como aprendiz de cajista en la Imprenta "La Gutenberg", junto a mi padre, Miguel Morales, quien le inculcó como el mismo escribió en alguna ocasión- “no sólo frías nociones mecánicas, sino amor por los entrañables metales con alma”. Pasó después como impresor a Madrid, donde su inquietud cultural le hizo pronto dedicarse a actividades literarias y editoriales, hasta 1958, en que marchó a Brasil. Tras unos años de estancia en ese país, se trasladó, en 1963, a los Estados Unidos, donde continuó una fecunda labor editorial, desarrollando diferentes actividades artísticas y profesionales como poeta, traductor, editor y fotógrafo. Ha publicado libros suyos (Hombre triste, Presencia, De la Niebla, Poemas, Amante amigo, De las cosas y el hombre...) y de docenas de poetas. Sacó a la luz poemas y antologías, destacando entre los primeros los Cuadernos de Poesía Ágora, y las colecciones también poéticas, Neblí y Lazarillo, y entre las segundas, Veinte poetas españoles, verdadera visión panorámica de la poesía española de la posguerra. También creó, junto a Concha Lagos, la Colección Ágora, de gran relieve literario en las décadas de los cincuenta y sesenta del siglo pasado. Él mismo figuró en la Antología de la novísima poesía española 1957, junto a Gloria Fuertes, Edmundo de Ory, Gabriel Celaya, etc.


Rafael es un poeta delicioso, suave y hondo, que lleva consigo en sus poemas una tristeza que logra hacer ternura en su llano y delicioso decir, una expresión intimista incluso en la descripción de lo exterior, que produce una emoción a la vez estética y afectiva.


A pesar del tiempo y la lejanía, Rafael no dejó de tener contacto con Castro, y el nexo de unión con su patria chica fue mi padre, al que siempre llamó su maestro, con quien mantuvo una fiel correspondencia, y que era para él, volviendo a parafrasear sus propias palabras, “a pesar de andar de un lado para otro, de un país a otro país, una isla donde podía tener la seguridad de encontrar cariño, comprensión, paz…”


Después del fallecimiento de mi padre yo continué este contacto y seguí informándole de algunas de las cosas que se cuecen por aquí enviándole, junto con mis cartas, algunas publicaciones locales, como las revistas de Feria Real, de las que es habitual colaborador.

Tampoco dejó de visitarnos en sus frecuentes venidas a España (no le teme coger el avión a pesar de su ya avanzada edad), la última en Mayo de 2007.



Además de impresor, poeta, escritor y traductor, Rafael es amante apasionado de la fotografía y también diseñador gráfico, tareas diversas pero complementarias que, aparte de los libros que ha preparado para otros autores, se han plasmado en la realización casi total de algunos de los suyos, como Lecturas de animales y Lecturas del suburbio, publicadas en EE. UU. y Canadá, en que textos, composición, diseño de portada e interiores y fotografías, fueron obra exclusivamente suya. Muestra de ello fue una interesante exposición en el Pósito Municipal, celebrada en 1992 paralelamente a un concierto de guitarra clásica de su hijo Luís (hoy, además de concertista, Profesor Asistente de Música y Director de Orquesta en la Universidad de Montana), ocasión en que también nos deleitó recitando poemas suyos y de Juan Ramón Jiménez como ilustración al programa musical.


Más de una vez estuvo en el recordado local del Llano San Rafael, allá en los años iniciales de Artesanos, compartiendo tertulia y copa con mi padre y otros amigos (por ahí anda una fotografía de una visita antes de su partida a Brasil), e incluso creo recordar un recital poético que ofreció a sus socios en el que también intervino un destacado fundador y amigo suyo: Tadeo Sánchez-Rincón.



Le informé de la aparición de la revista del Círculo, solicitándole la colaboración de algún trabajo suyo. Y Rafael, desde su lejana residencia de Watertown (Massachussets), donde feliz y lúcidamente cumplió el pasado Noviembre los 90 años de edad, accedió gustosamente a ello, enviándonos el relato Destino, escrito para su libro inédito Cuentos extraños, que se incluye a continuación.

3 comentarios:

D. dijo...

Hola,

Soy Débora Altit Millán, nieta de Rafael... ¿Podría ponerse en contacto conmigo? Mi email es daltit@gmail.com

Gracias y un saludo,

Débora.

BlasCri dijo...

Hace unos minutos la radio ha dado la noticia del fallecimiento de Rafel Millán. En el periódico "El Día de Córdoba" (12/01/2010) viene un artículo que recoge el suceso y en el que se hace una semblanza de este gran poeta castreño. Os dejo el enlace (http://www.eldiadecordoba.es/article/ocio/604208/muere/impresor/editor/y/poeta/castreno/rafael/millan/pinillos.html).
Ha sido una gran perdida. Creo que la gente de la cultura de nuestro pueblo deberímos rendirle un merecido homenaje a este gran poeta que paseo su verso entre dos siglos.

Mis condolencias a su familia y amigos.

Anónimo dijo...

HOLA SOY CLARA RUIZ MILLAN,NIETA DE RAFAEL,MI MAS PROFUNDO AGADECIMIENTO POR EL CARIÑO DEMOSTRADO HACIA MI ABUELO. clara792@hotmail.com